Nos encontramos, sin duda, ante la numerología de un líder/guerrero que ha venido a conquistar y también a preservar y proteger todo aquello que considera que ha de ser protegido.
Esta configuración numérica convierte a la persona en una activista comprometida con la misión de salvar al mundo o “su mundo”.
Sin embargo, todo este potencial puede ser dirigido hacia la luz o hacia la oscuridad.
Si las energías están dominadas por el ego, existe el peligro de que la persona crea que el mundo es su propio proyecto personal y se sienta con la responsabilidad de tomar decisiones “por el bien de la humanidad”.